Agente inmobiliario
Un agente inmobiliario es un especialista que trata con la compra, venta, permuta y arrendamiento de locales residenciales y no residenciales, en otras palabras: un intermediario entre el vendedor y el comprador (propietario e inquilino) de bienes raíces.
Las principales cualidades necesarias para un agente inmobiliario:
- organización,
- sociabilidad,
- cortesía,
- tolerancia al estrés,
- movilidad,
- creatividad,
- iniciativa.
El dominio de idiomas extranjeros también es un factor importante para la organización rentable del trabajo de un agente. También lo es la posesión del carnet de conducir y un coche propio, el uso seguro del PC y otros equipos de oficina. En resumen, un agente inmobiliario moderno y exitoso es un especialista que combina una variedad de habilidades y destrezas: de abogado, economista, psicólogo y mercadólogo en una sola persona.
Las responsabilidades clave de un agente de bienes raíces:
- colección de una base de datos que incluya información para la venta/ alquiler de propiedades;
- análisis de la oferta y la demanda de varios tipos de propiedades;
- búsqueda de compradores/inquilinos;
- consultoría de clientes, selección de opciones adecuadas;
- exhibición de objetos de acuerdo con los vendedores/propietarios;
- preparación de la documentación necesaria (referencias, extractos, permisos, etc.);
- redacción de contratos de compra-venta/renta;
- ejecución de contratos de compra-venta/renta;
- prestación de otros servicios relacionados.
La regulación a nivel legislativo del trabajo de las agencias y especialistas inmobiliarios en todo el mundo se lleva a cabo de diferentes formas. En algunos países, cualquier persona puede dedicarse a la actividad inmobiliarias, no hay requisitos especiales para los agentes. Al mismo tiempo, en otros estados, este tipo de actividad requiere una educación adecuada (realizar cursos, etc.) y la obtención de licencias.