El proyecto de la casa tiene una geometría estricta y caerá en el alma de los amantes del minimalismo en la arquitectura. Forma cúbica, homogeneidad de color con elementos decorativos de diferentes materiales para crear contraste.
Una de las características de esta casa de campo es la ‘segunda luz’, que crea una sensación de amplitud, aumenta la cantidad de luz solar, lo que le permite encender las luces raramente durante el día, incluso en temporada baja.
Las grandes ventanas y los techos altos amplían visualmente el espacio, haciendo que su estancia en el interior sea lo más cómoda posible.
La distribución es detallada: 3 amplios salones, una amplia cocina-salón con ‘segunda luz’, una gran terraza. Una gran opción tanto para un pequeño número de residentes como para una familia numerosa.
En el acabado se utiliza yeso y azulejos de revestimiento.