Un edificio de piedra de 1920, lleno de carácter y bajo la tutela de nuestra familia durante un siglo, adorna el corazón de Stari Grad en Hvar, presidiendo orgullosamente la plaza principal. Se encuentra junto al mar, a pocos metros de su puerta.
Esta venerable estructura de 462 metros cuadrados no es solo una vivienda; es un lienzo para sus ambiciones.
Con sus amplias proporciones y ubicación estratégica, la propiedad invita a la transformación. Ya sea que su visión abarque una elegante residencia familiar, un hotel boutique, un albergue acogedor o la creación de apartamentos opulentos, las posibilidades son tan amplias como su imaginación.
La planta baja se ha dedicado cuidadosamente a un próspero restaurante, que sirve como arrendamiento privado que genera un flujo constante de ingresos. En un sentido real, es un aporte sustancial para el hogar.
Oportunidades como esta, caracterizadas por su escala, carisma y ubicación privilegiada, son una rareza. Anticipamos que los inversores extranjeros se sentirán cautivados por el potencial que se esconde tras estos venerables muros de piedra.
Esta propiedad histórica está lista para que la visites y se presenta para que la inspecciones, aunque con cita previa. No dudes en aventurarte más allá de su majestuosa fachada y descubrir el potencial infinito que encierra.
Los gastos adicionales que corren por cuenta del comprador de un inmueble en Croacia son de alrededor del 7% del valor total de la propiedad, que incluye: impuesto de transferencia de propiedad (3% del valor de la propiedad), comisión de agencia/intermediación (3%+IVA sobre la comisión), honorarios de abogado (aproximadamente el 1%), honorarios de notario, honorarios de registro judicial y gastos de traducción certificada oficial. El contrato de agencia/intermediación se firma antes de visitar las propiedades.