Los extranjeros pueden comprar cualquier propiedad en venta en Holanda, y tantas como deseen. Puede comprar apartamentos y casas tanto en efectivo como dentro de programas hipotecarios. Al realizar la compra, los extranjeros pagan un impuesto y una tasa notarial del 6% y del 0,7-1,5% del valor de la propiedad, respectivamente.